Pepe Valencia/ COLUMNA ADELANTE
Cuando lo publiqué hace ocho meses hubo amigos que preguntaron con sorna si me creía la reencarnación de Nostradamus a pesar de que en anteriores ocasiones, en casi todas, he acertado en mis pronósticos.
En los dos primeros párrafos de mi columna del 7 de enero de 2019 escribí lo siguiente:
Expresaré sólo 4 vaticinios para este año y, conste, no son deseos personales ni nada que se parezca. Son acontecimientos que ocurrirán a lo largo de los próximos días o meses. Ahí van:
–Se va el fiscal general Jorge Winckler.
Este fue el primero de cuatro augurios contundentes para este año. Ahora digo: No es necesario ser vidente ni poseer poderes extraordinarios para adelantarse a ciertos eventos sociales, políticos o económicos.
Los reporteros preguntamos, investigamos, analizamos e informamos. A veces nos equivocamos y rectificamos.
Retomando el caso Winckler, las reacciones son encontradas.
Por un lado están los que se identifican y simpatizan con él porque lo consideran víctima del poder político. Lo admiran por enfrentarse al gobernador Cuitláhuac García y defender la autonomía de la Fiscalía.
Por el otro, los que recuerdan que lo mismo o algo peor le hicieron al anterior fiscal, Luis Ángel Bravo Contreras. Afirman que Winckler es aliado de Miguel Ángel Yunes Linares y que acaso protege a delincuentes y apenas empieza a recibir su merecido.
Si el ex fiscal es culpable de lo que se le acusa, entonces que se aplique la ley, se le procese y encarcele. Y si es inocente, que se le reinstale en el cargo y se castigue a quienes incurrieron en el delito de prácticamente destituirlo de manera tan humillante.
Ojalá, sea cual sea el desenlace de este episodio, esto sirva para que de verdad se persiga a la delincuencia, disminuyan los altos índices de inseguridad y vuelva la tranquilidad a los hogares veracruzanos.
Todos los días hay balaceras y ejecutados en el estado. Ni la otrora tranquila Xalapa se salva de la violencia mientras los servidores públicos encargados del ramo se culpan mutuamente en vez de implantar estrategias eficientes y eficaces contra los criminales.
Se fue Winckler, ¿ahora qué?
Asegura que se defenderá en tribunales. ¿Regresará como fiscal? ¿Le imputarán otros cargos y terminará en la cárcel como su antecesor Luis Ángel Bravo?
Una pregunta que bulle en la mente de muchos veracruzanos es si el brazo de la justicia o la venganza, alcanzará al exgobernador Miguel Ángel Yunes y seguirá los pasos de Javier Duarte.
Posdata.- Después les recordaré cuáles son los restantes 3 pronósticos que formulé para este año. También se cumplirán al pie de la letra. La salida de Winckler es el primero de la lista de 4.