- El fiscal especial para el caso Ayotzinapa revela que detuvieron a dos elementos más de la Policía Federal Ministerial por presuntos actos de tortura.
Por : cxnoticias.com
CIUDAD DE MÉXICO.- De los únicos restos que se tiene certeza en dónde se encontraron, son los de Christian Alfonso Rodríguez Telumbre, porque de los de Alexander Mora Venancio no se sabe el lugar exacto y en el caso de Jhosivani Guerrero de la Cruz no hay evidencia genética que los hallados pertenezcan a él, asegura el fiscal especial para el caso Iguala, Omar Gómez Trejo.
«Está la identificación 100% clara de Alexander Mora Venancio, pero lo que no se sabe y no se tiene la certeza es en dónde se encontraron [sus restos], y de Jhosivani Guerrero de la Cruz, de él no se tiene la certeza, incluso de la identificación, pues no dio los patrones de genética que piden los peritos», indica en entrevista con EL UNIVERSAL.
«La verdad histórica se acabó»: Identifican a normalista de Ayotzinapa y señalan que «…
Para el fiscal Gómez Trejo, lo único que cambia de la narrativa, con la identificación del alumno Christian Alfonso, es que los estudiantes desaparecidos de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa no fueron incinerados en el basurero de Cocula, como señala la llamada «verdad histórica» que sostuvo en un principio la extinta Procuraduría General de la República (PGR).
Además, el fiscal especial para el caso Ayotzinapa revela que detuvieron a dos elementos más de la Policía Federal Ministerial por presuntos actos de tortura contra uno de los detenidos por los hechos ocurridos hace más de cinco años en Iguala, Guerrero.
¿Cuál es la hipótesis a la que conduce este hallazgo de restos?
—Es una línea de investigación. La hipótesis es la desaparición de los estudiantes en esa fecha, después se quiso construir una narrativa con testimonios obtenidos bajo tortura, ilicitud de pruebas obtenidas no de manera apegada a la legislación, situación de la cual, de hecho, ya se encargó el Tribunal Colegiado de Matamoros, en 2018.
Lo que reportamos, del hallazgo que tuvimos, es clave en el sentido de que hay una nueva línea de investigación en donde ya tenemos una identificación. La del normalista Christian Alfonso Rodríguez Telumbre es la única certera que tenemos del lugar en donde se encontró.
Obviamente tenemos una serie de declaraciones periciales, de reconstrucción de hechos en las que no se tuvieron cuidado en aquel entonces y nosotros hemos ido saneando y recuperando, y eso nos ha ayudado a construir datos mucho más fuertes de una narrativa de cómo se fue desarrollando la mecánica de la desaparición.
¿De la narrativa en concreto, qué cambiaría? Porque la verdad histórica estableció que los estudiantes de Ayotzinapa fueron secuestrados, asesinados e incinerados en el basurero de Cocula.
—Lo del basurero de Cocula se viene cuestionando desde hace varios años. De lo que tenemos certeza es que encontramos, en un lugar denominado la Barranca de la Carnicería, a raíz de una diligencia que realizamos en noviembre, restos de Christian Alfonso Rodríguez Telumbre, esa es la narrativa y la certeza que tenemos ahora.
Es un proceso de identificación que contó con el acompañamiento de las víctimas, de sus representantes, de los expertos