- Comerciantes de mercado ven un panorama complicado para Día de Muertos; “ventas han bajado, pero aun con miedo tenemos que salir”
Como cada año desde 1968, el aroma a copal, los disfraces, las calaveras de azúcar y el papel picado son exhibidos en los puestos del mercado Jamaica, pero esta ocasión es diferente, pues los vendedores retan a la pandemia de Covid-19, con tal de salir adelante.
Es de noche y los comerciantes apenas el viernes pasado llegaron a un acuerdo con la alcaldía de Venustiano Carranza.
A diferencia de otros años, cuando no se podía transitar por sus pasillos por la cantidad de gente que acudía, ahora lucen semivacíos, sólo unos pocos se aventuran al mercado.
Los mercaderes esperan pacientes que la venta mejore antes de la fiesta del Día de Muertos, pues la crisis ocasionada por la emergencia sanitaria los ha puesto en complicaciones.
Entre los productos que se comercian en Jamaica se pueden encontrar máscaras y disfraces. Los vendedores siguen las medidas de salud, como el uso de cubrebocas y la aplicación de gel antibacterial.
Por ello, acataron todas las medidas sanitarias, colocaron tapetes sanitizantes en la entradas, limpian diariamente sus lugares y regalan gel antibacterial a los visitantes, a pesar del riesgo que corren ante el virus.
Gloria López, quien tiene 75 años y lleva vendiendo sus calaveras de azúcar y figuras de chocolate por más de 50 años, comenta: “Aún con miedo y todo tenemos que vender, tenemos que buscarle.
“A nosotros nadie nos da apoyo, somos comerciantes, sin esta romería cómo le vamos a hacer si tampoco hay trabajo”, dice.
Igual que ella, Virginia, quien también es una persona de la tercera edad y que vende disfraces desde hace 40 años en Jamaica, advierte: “Existe el riesgo, no lo voy a negar, pero tenemos que salir a vender.
“Esta romería se pone casi al inicio de octubre y ahora nos pudimos poner una semana antes del 2 de noviembre. Hay poca gente, las ventas han caído casi 60%, pero es eso o nada, qué le vamos a hacer”, asegura.
Al final del pasillo, en la esquina con la avenida Congreso de la Unión, en un puesto con cientos de calaveras de papel mache, la familia Belmont sobresale de esta infinidad de cráneos y huesos decorados. Son cuatro miembros: el señor Jaime, su esposa Laura, y sus dos hijos.
Otro de los artículos más buscados para el Día de Muertos es el papel picado, el cual en Jamaica se vende en distintas formas y tamaños.
Han vendido durante 10 años esas artesanías en el mercado. Jaime recuerda que nunca habían pasado por una situación similar y mucho menos habían tenido ventas tan bajas como en esta ocasión, algo que, considera, es histórico.
“Nunca había estado tan baja la venta. Esto es histórico. Las ventas han caído como 60%.
“Años antes ni podíamos comer [porque] la gente se arremolinaba en los puestos, [pero] hoy los pasillos lucen vacíos.
“Se entiende por la pandemia, por eso aquí, todos lo comerciantes usamos cubrebocas y regalamos gel antibacterial para estar seguros nosotros y los clientes”, afirma el comerciante.
Así, entre la incertidumbre y la esperanza de que lleguen olas de clientes como el año pasado, los vendedores, protegidos con cubrebocas de cráneos, tapetes sanitizantes y gel antibacterial, retan al Covid-19 y buscan en 2020 mantener viva la tradicional fiesta del Día de Muertos en el mercado Jamaica.