Autoridades municipales, pero sobre todo la titular del DIF, Yuli Sánchez Carrillo no baja la guardia en apoyo a las familias que por el desempleo que trajo consigo la crisis sanitaria del CoronavirusEnfrentan problemas económicos, es por ello que junto a su equipo de trabajo recorren todos los sectores para cumplir con el Programa de Apoyo Alimentario (PAA).
“Tenemos de ser equitativos, por eso vamos y hacemos la entrega directa, nada de intermediarios para evitar que mañana o pasado se diga que la lideresa o representante de tal o cual barrio o ejido se quedó con las despensas, además me gusta estar en contacto con las demás familias”, comenta Yuli Sánchez en el trayecto de un barrio a otro.
La presidenta del DIF se dice encantada de su actividad porque desde que inició la administración contó con todo el respaldo del alcalde Fredy Ayala y junto a él han apoyado a las familias que se ven afectadas ante esta crisis de salud que afecta al mundo, con la fe en Dios, que pronto volveremos a la normalidad y renovar fuerzas para seguir trabajando por nuestro pueblo”, comenta al caminar por uno de los barrios de la periferia con una bolsa de víveres que al entregarla a un ancianito, masculla con voz entrecortada por su edad: “Dios derrame muchas bendiciones en ti y tu familia mi chula. Muchas gracias por no olvidarnos”.
Le pregunto ¿Estos víveres llegan a la bodega del DIF empaquetados?
“Los que integran el DIF municipal son un gran equipo, sabemos que en muchos hogares nos esperan ansiosos y tenemos que estar del lado de ellos, entendemos que esta es una crisis muy difícil, por eso todo el equipo de trabajo está a la disposición cuando se tienen que hacer estos paquetes, gracias a los hombres y mujeres del Ayuntamiento que siempre contribuyen para hacer estos trabajos, en Sayula tenemos que saber que ha llegado la hora de la solidaridad”, mencionó.
La vida de Yuli Sánchez entró a una dinámica que jamás imaginó: ser esposa, ser madre y ser presidenta del DIF ha sido un rol difícil, cuenta en “corto”, pero al mismo tiempo acepta que esta experiencia ha enriquecido su esencia y sensibilidad.
“Saber que una silla de ruedas, un bastón, un medicamento o un proyecto productivo transformará la vida de alguien, indudablemente es una gran experiencia el servir a mi pueblo desde el DIF” relata Yuli Sánchez.