Raúl Rodríguez Cortés / opinión
Fuente: El Universal
El candidato de Movimiento Ciudadano (MC) a la gubernatura de Nuevo León, Samuel García Sepúlveda, reconoció hace unos días que son pocos los recursos públicos que ha recibido para su campaña, “millón y medio si bien me va”, dijo en entrevista televisiva.
“El MC es un partido muy chiquito, no como el PAN o el PRI, a los que les llegan cascadas de prerrogativas, explicó el aspirante mejor posicionado en varias encuestas para ganar la elección del próximo 6 de junio. Por ello dijo estar obligado a financiarse con aportaciones privadas, entre las que estarían unos 20 millones de pesos donados por él, sus hermanos y madre, lo que —aseguró— está permitido por la ley.
Si bien no es delito poner de tu bolsa para financiar una campaña, ese tipo de donación debe ser especificada ante la autoridad electoral para fiscalizar el origen del dinero. También debe sujetarse a las reglas establecidas para el financiamiento privado. Y los montos permitidos en este caso, ya han sido ostensiblemente rebasados por García Sepúlveda, cuando todavía faltan 42 días para los comicios.
El tope de gastos de campaña para gobernador de Nuevo León se fijó en 72 millones 86 mil 341 pesos con 30 centavos. El financiamiento de simpatizantes está limitado a diez por ciento de ese tope, lo que quiere decir que no debe rebasar los siete millones 208 mil 634 pesos. Además, el monto máximo que puede aportar cada simpatizante es de 720 mil 863 pesos con 41 centavos, y toda aportación en efectivo o especie superior a los ocho mil 65 pesos, se sujetará a revisión del INE mediante la compulsa con terceros y la fiscalización de autoridades financieras y fiscales.
Si, como reveló, Samuel García Sepúlveda recibió aportaciones suyas, de su mamá y hermanos como simpatizantes por 20 millones de pesos y el límite de ese tipo de financiamiento es de siete millones 208 mil 634 pesos, ya rebasó el monto permitido en doce millones 791 mil 366 pesos. Y si el tope de donación para cada simpatizante es de 720 mil 863 pesos, él y su mamá deben tener unos 27 hermanos-hijos para que, sin rebasar lo permitido en aportaciones personal, reunieran los 20 millones de pesos referidos por el candidato del MC.
Queda claro con este simple ejercicio aritmético, que Samuel García Sepúlveda ha recibido financiamiento a todas luces ilegal. Y aún más: el aspirante a gobernador de Nuevo León solo ha declarado en sus informes a la autoridad electoral 297 mil 890 pesos de aportaciones privadas de simpatizantes. ¿Dónde están registrados los 20 millones de pesos de los que habla? Si son donaciones hasta ahora no identificadas, entonces ¿de dónde provienen?
Por lo que ha dejado ver de su vida pública en su paso por el Congreso local y el Senado de la República, García Sepúlveda, de 33 años, vive, habla y se comporta como un “mirrey”, término coloquial usado en el país para referir a un joven que proviene de una familia adinerada, que lleva una vida de lujos, fiestas, caprichos y excesos, volcado en sí mismo, narcisista, enfundado en ropa de marca y siempre preocupado por lo convencional. El referente es el cantante Luis Miguel a quien miles de sus fans llaman Luis Mi Rey.
Si bien ninguno de los aspirantes a gobernar Nuevo León ha gastado hasta ahora más del 32% de los 72.8 millones de pesos establecido como tope de gastos de campaña, todos ellos reportan hasta ahora excesivos montos para promocionarse y Samuel García Sepúlveda es el que más.
El portal de fiscalización del INE reportaba hasta el 19 de abril pasado gastos de 22.4 millones de pesos del abanderado del MC. Más de la mitad (12.3 millones) lo ha invertido en sitios web y redes sociales, donde su esposa Mariana Rodríguez es reina de los “influencers” y de quien echa mano constantemente para aumentar su popularidad. Es también el que más ha gastado en radio y televisión. En cuanto a propaganda en la vía pública, es el segundo al igual que en medios impresos.
Pareciera entonces, en congruencia con lo descrito, que Samuel García Sepúlveda es un “mirrey” que quiere ganar la gubernatura como él sabe hacerlo: a billetazos.
Instantáneas:
1. GUERRA DE DESCALIFICACIONES. Por lo visto en las más recientes encuestas, la candidata de Morena al gobierno de Nuevo León, Clara Luz Flores, no ha podido recuperarse del golpe que le asestó su contrincante del PRI, Adrián de la Garza, al hacer público un video de su encuentro con Keith Raniere, el convicto estadounidense líder de la secta NXIVM, relación que ella negó en repetidas ocasiones. A ello se atribuye su caída al tercer lugar en las preferencias electorales y la creciente preocupación en Palacio Nacional de que se den a conocer otros videos que documenten ese vínculo. Dicen los que saben que desde la 4T la respuesta fue el anuncio de que la Unidad de Inteligencia Financiera investiga cuentas en el extranjero del exgobernador Rodrigo Medina, uno de los principales promotores de la candidatura del priista De la Garza. Éste, a su vez, la emprendió contra el candidato del MC, Samuel García Sepúlveda, al mostrar una fotografía de éste, quien cuando niño y con su padre aparece en una fotografía con Gilberto García Mena “El June”, el hoy encarcelado capo del Cártel del Golfo. De haber una relación, como se sugiere, ¿será que de ahí provienen las excesivas aportaciones privadas? Mera curiosidad.
2. PRESIONES Y TENSIONES crecen en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) a propósito de la decisión que deberán tomar sobre la devolución o no de las candidaturas de Morena a los gobiernos de Guerrero y Michoacán reiteradas por el INE a Félix Salgado Macedonio y Raúl Morón, respectivamente, por no reportar gastos de precampaña. La magistrada Janine Otálora y los magistrados Indalfer Infante, Reyes Rodríguez, Felipe de la Mata y Felipe Fuentes, enviaron una carta al magistrado presidente José Luis Vargas para cuestionar la decisión que tomó de posponer la sesión que trataría el asunto ayer jueves hasta el martes próximo. Consideraron que fue tomada de manera unilateral en contravención de las atribuciones del pleno, que se les notificó hasta las 9:39 de la noche del miércoles pasado y que ese cambio de última hora incidirá en las resoluciones que habrán de tomarse. Aparentemente para evitar que con tal posicionamiento pudiera replantearse para hoy la sesión del pleno, la magistrada Mónica Soto Fregoso pidió este día a cuenta de vacaciones. Por cierto, de Soto Fregoso es el proyecto de resolución que plantea regresar la candidatura al michoacano Raúl Morón y de Indalfer Infante el que propone ratificar la decisión del INE de quitar la candidatura al guerrerense Salgado Macedonio.