La Fiscalía reconoce que su eficacia de sentencias a homicidas es menor al 10%/ Místicos y Terrenales
- La Fiscalía de Veracruz infla sus datos sobre detenidos y sentencias por homicidios
- Y aún inflando la información, reconoce que su eficacia de sentencias a homicidas es menor al 10%
- Eric Cisneros se arrepiente, ya no quiere ser candidato a nada
Marco Antonio Aguirre Rodríguez
El gobernador Cuitláhuac García está desesperado por mostrar que en Veracruz la violencia homicida ha bajado, incluso más que en el promedio nacional.
Quiere que le crean que aquí todo es paz y tranquilidad, que ya no pasa nada.
Pero también le urge demostrar que en Veracruz las cosas se hacen bien. Son muchas, muchas, las veces que le han reclamado que hay una alta deficiencia en la procuración de justicia, que hay una altísima impunidad tan sólo de los crímenes conocidos -pero muy alta-, que son muchos -pero en verdad un alto porcentaje- de reos que recuperan su libertad por que las carpetas de investigación están mal integradas o incluso porque son culpables fabricados.
Por eso a Cuitláhuac García y a la fiscal Verónica Hernández Giadans, se les ocurrió inflar sus números, los números de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Veracruz.
Y para que esto resulte mejor, a la par, está el ocultamiento de información, al dejar casos de homicidios sin registrar o al anotarlos como homicidio culposo (es decir el que se comete sin la intención de asesinar a alguien, si no, mayormente, por causa de algún accidente) en lugar de ponerlos como homicidios dolosos (o sea, los asesinatos).
A esto se le suma el terror que Cuitláhuac García sembró en los jueces locales para que no dejen en libertad a ninguna persona que sea presentada por la Fiscalía, aunque sea evidente que es inocente, que le fabricaron la culpabilidad, que lo torturaron para obtener las declaraciones o simplemente porque está mal integrada la carpeta de investigación.
El caso más notorio y que visibilizó estas irregularidades, es la detención de la jueza Angélica Sánchez Hernández, acusada de tráfico de influencias y detenida a pesar de contar con un amparo.
Esto es sólo una evidencia de las ansias de Cuitláhuac García por fabricar números que muestren que la procuración de justicia en Veracruz mejoró.
No le importa para nada la ley ni su cumplimiento y lo ha demostrado una y otra vez, pues en cambio protege criminales, como los funcionarios públicos y policías acusados de tortura o de agresores sexuales, mientras busca encarcelar a otros.
Pasa por encima hasta de las recomendaciones de las comisiones de derechos humanos y para ejemplo el caso de July Raquel, condenada a 60 años de cárcel, a pesar de que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos acreditó la tortura y violación que sufrió y que se ha mostrado que estaba en la ciudad de México cuando asesinaron a la rectora de una universidad particular en Xalapa, que es el crimen del que se le acusa.
O la situación de Antonio del Río Argudin, torturado en el llamado Penalito de Veracruz por un funcionario, el director de esa institución, Iván Márquez Lucido, quien en lugar de ser sancionado es protegido por el gobierno de Cuitláhuac García para que no se le castigue; con la anuencia del secretario de Seguridad Pública, Cuauhtémoc Zúñiga Bonilla, fue cambiado del Penalito al penal de Pacho Viejo, para encubrirlo.
A la par, la Fiscalía de Veracruz hace todo por retrasar el proceso lo más posible, para ver si se enfría y el señalado, Iván Márquez, queda impune.
Hay más, muchos más ejemplos de las irregularidades en la procuración de justicia en Veracruz.
Por eso es llamativo que la Fiscalía de Veracruz ahora quiera mostrarse más eficaz.
Pero aún con todo y sus números inflados, dan testimonio de que su eficacia para castigar los homicidios en Veracruz es baja, muy baja, menor al 10%.
La semana pasada, el 5 de julio, la Fiscalía mostró ante los medios que acuden a las conferencias de prensa del gobierno del estado, sus números, en donde se muestran con una efectividad creciente.
Pero también esos números son contradictorios con información proporcionada antes por la misma Fiscalía.
Así la Fiscalía de Veracruz asegura que en el 2022 registró 854 homicidios dolosos, y ante esto hizo 293 detenciones.
Un número muy lejano del tamaño del crimen reconocido, aún con el ocultamiento de datos.
En ese año la FGE incrementó el número de homicidios culposos registrados, y por primera vez en la historia, ésta categoría resultó con un mayor número que los homicidios dolosos: 991 de los primeros y 854 de los homicidios intencionales.
Pero bueno, según sus números oficiales, el número de sentencias que obtuvo del Poder Judicial de Veracruz fue de 77, aún con todo y las presiones a los jueces para que no liberen a los detenidos que esa instancia presenta, bajo ninguna circunstancia.
Esto es, su eficacia para castigar el crimen de homicidio llegó al 9.01%.
Ni siquiera truqueando los datos, presionando al Poder Judicial, fabricando culpables, pudieron mejorar su “eficacia” más allá del 10%.
Aún con ese porcentaje que para nada significa castigo a los delincuentes, ese 5 de julio en que presentaron sus números, el gobernador Cuitláhuac García se atrevió a decir que en Veracruz “no hay impunidad, el mensaje es claro, y tenemos un Veracruz más seguro”.
¿Y el otro 91% de asesinatos en Veracruz a que hora se castigaron como para decir que en el estado no hay impunidad?.
Pero hay más, los números no corresponden con información previamente proporcionada por la misma Fiscalía de Veracruz y el Poder Judicial y publicada en la columna “La muerte asesina tiene impunidad en Veracruz: Fiscalía solo ha resuelto 16 de cada mil homicidios que se cometen en el estado”
(en https://laclaveonline.com/2022/09/20/la-muerte-asesina-tiene-impunidad-en-veracruz-fiscalia-solo-ha-resuelto-16-de-cada-mil-homicidios-que-se-cometen-en-el-estado/ entre otros medios que se difundió).
Una muestra tan sólo de estas diferencias, son los datos que se proporcionaron oficialmente sobre el número de imputados y el de vinculados a proceso.
Por ejemplo, en el 2021, los imputados fueron 132, pero los vinculados a procesos nada más fueron 88.
La Fiscalía en sus nuevos datos asegura que detuvo a 309 personas.
Los números no cuadran y son datos oficiales.
Esto es una muestra de que el gobierno de Cuitláhuac García y la Fiscalía de Veracruz, siguen navegando en el reino de los otros datos, los que quieren que les creamos sólo por que lo dicen ellos.
Así son los místicos cuando no tienen como demostrar que hacen un buen trabajo.
ERIC CISNEROS SE ARREPIENTE, YA NO QUIERE SER CANDIDATO A NADA
Después de que el presidente le dijo en directo a Eric Patrocinio Cisneros Burgos que “si quiere ser candidato, que renuncie a su cargo”, al secretario de Gobierno de Cuitláhuac García se le bajaron los colores y hasta su tono de piel que presume, se le blanqueó.
Pero pronto se recompuso, buscó una plataforma publica y dijo que no va a renunciar.
O sea, ya no quiere ser candidato… a nada.
Dice que sus espectaculares son para la difusión de su libro, nada más que en la última generación de estos el libro se coloca con letras chiquititas, allá perdidas, que nadie ve: como algo que no importa.
Cualquier mercadólogo puede corroborar esto.
Y en algunos anuncios ni siquiera se menciona el libro, como en éste anuncio https://twitter.com/marcoaguiro/status/1678482866756542464?s=20 .
En cambio se repite la leyenda de que “los afrojarochos existimos porque resistimos”, y su nombre en letras gigantes, como 30 veces más grande que la leyenda.
Y luego abajo un mensaje de autoagradecimiento, con el que Eric Cisneros se quiere volver el defensor de los afrojarochos: ¡Gracias por hacernos visibles!.
Más en la historia de Veracruz hay muchas personas de piel obscura que han destacado, por sus méritos, y no por quererse adjudicar una cuestión racial.
Como sea, Eric Cisneros dice que no renuncia al cargo, o sea que ya no quiere ser candidato, porque si buscase, todavía, alguna postulación, ya debería de haber dejado el puesto, porque López Obrador se lo dijo bien claro: “si quiere ser candidato, que renuncie a su cargo”.
Pero no quiere renunciar, o sea que ya no quiere ser candidato.
Esa “encuesta” que promovió en la que salía mejor posicionado que Rocío Nahle, ahora debe ser ocultada, se debe buscar la forma de dejarla en el olvido, de desaparecerla.
A lo mejor sus amigos del Organismo Público Local Electoral de Veracruz le hacen el favor de ordenar a todos los que publicaron esa encuesta que la borren, la eliminen de sus hilos y redes, como ya hicieron antes con otras informaciones que no le eran favorables a Eric Cisneros.
Con eso de que creen que pueden pasar por encima de la libertad de expresión y de prensa…
Hoy Eric Cisneros es un místico que va para abajo.
Por cierto, ¿cuántos libros necesitaría haber vendido para pagar la publicidad que tiene por todo el estado?.