Por: Jorge Tolentino García.
AMLO: Hola Rocío, buen día. Necesito que hables con Amado Cruz Malpica. Es el presidente municipal de Coatzacoalcos. Lo conoces, ¿verdad?
Rocío: Sí, claro que lo conozco. Es un buen hombre, inteligente y con buena experiencia en cuestiones electorales.
AMLO: Pues eso mismo. Quiero que lo mandes a llamar y le pidas que te coordine la campaña a la gubernatura de Veracruz. Él sabe cómo moverse en ese estado. Tiene el apoyo de la gente y de los líderes sociales. Es un hombre de confianza.
Rocío: ¿Y él aceptará? ¿No tendrá otros planes?
AMLO: No te preocupes por eso. Yo ya hablé con él y le dije que te ayudara. Él está dispuesto a colaborar con nosotros. Sabe que es por el bien de la Cuarta Transformación.
Rocío: Bueno, pues si usted lo dice, señor presidente, yo le haré caso. Voy a llamarlo ahora mismo y le diré que venga a verme.
AMLO: Así me gusta, Rocío. Eres una mujer valiente y comprometida. Estoy seguro de que vas a ganar la gubernatura de Veracruz con un amplio margen de votos. Sólo es cuestión de establecer una buena estrategia y Amado ya se la sabe de todas… todas…
Rocío: Gracias, señor presidente. No lo voy a defraudar. Voy a trabajar duro para que Veracruz sea un ejemplo de progreso y justicia social.
AMLO: De nada, Rocío. Cuenta con mi apoyo y el de todo el pueblo bueno. Vamos a hacer historia juntos.
Entonces Rocío Nahle da instrucciones para que le llamen a Amado.
Rocío: Amado, te mando a llamar porque tengo una noticia que darte. Es algo muy importante para tu carrera política y para el futuro de Veracruz.
Amado: ¿Qué pasa, inge? ¿De qué se trata?
Rocío: Pues mira, el señor presidente me ha pedido que te integres a mi equipo de campaña para la gubernatura de Veracruz. Quiere que seas mi coordinador general y que me ayudes a ganar la elección.
Amado: ¿En serio? ¿El señor presidente me ha elegido a mí?
Rocío: Así es, Amado. Él confía en ti y en tu trabajo. Sabe que eres un hombre inteligente, honesto y con experiencia. Sabe que tienes el apoyo de la gente y de los líderes sociales. Sabe que eres un hombre de Morena.
Amado: No sé qué decir, inge. Estoy muy agradecido con usted y con el señor presidente por este llamado tan importante. Es un honor para mí poder servirle y acompañarla en este proyecto tan grande.
Rocío: Me da gusto que aceptes, Amado. Eres un hombre valiente y comprometido. Estoy segura de que juntos vamos a hacer historia en Veracruz.
Amado: Así será, inge. Le echaré todas las ganas y buscaré el apoyo de otros compañeros de Morena, para hacer un buen proyecto político que siga impulsando su imagen en todo Veracruz.
Rocío: Me gusta esa idea del proyecto político, Amado. Te lo iba a pedir y adivinaste mi pensamiento. Quiero que me presentes un adelanto en unos días más. Y por favor, toma en cuenta a todos los que se han rajado el alma caminando en las colonias, ejidos y congregaciones en Coatzacoalcos y en todo el estado. Quiero una campaña integrativa y sumatoria con todos los morenistas de Veracruz.
Amado: No se preocupe, inge. Todo se hará como usted lo ordena. Tenga por seguro que no la defraudaré y que ganaremos bien la elección con los mejores hombres y mujeres de Morena. Y claro, con el compromiso de integrarlos al gabinete estatal posteriormente.
Rocío: Claro que sí, Amado. Eso es lo que queremos, un gobierno del pueblo y para el pueblo. Un gobierno de la Cuarta Transformación.
Amado: Así es, inge. Un gobierno que haga historia y cambie la realidad de Veracruz.
Rocío: Bueno, pues así quedamos, Amado. Vamos con todo por la transformación de Veracruz.
Amado: Me deja usted muy motivado, estimada ministra. Y claro que sí, vamos a seguir todas sus instrucciones por el bien de Veracruz.
Rocío: Hasta luego, Amado.
Amado: Adiós, estimada Rocío.
Fin.
P.d. Todo parece indicar que el cuento tiene mucho de verdad. Y si no. Al tiempo.