- El mensaje de Cazarín al arranque de la semana vuelve nuevamente a prender las alertas, pues pareciera ser la advertencia anticipada de que las cosas no serán nada tersas
Arrancando la semana llega nuevamente una fotografía que enciende las redes sociales, en la misma, se logra ver a la Coordinadora Nacional de los Comités de Defensa de la Cuarta Transformación, Claudia Sheinbaum Pardo, junto a su pareja sentimental, Jesús María Tarriba Unger -analista de riesgos económicos en el Banco de México-, a su lado el personal de mayor cercanía con la hoy precandidata presidencial, y el orquestador de la fotografía, Juan Javier Gómez Cazarín, desayunando en Veracruz, en una de sus recientes visitas a la entidad.
La realidad es que no es nada extraño el que los políticos veracruzanos se tomen algunas gráficas y las reserven para en determinado momento difundirlas a manera de recordatorio de sus alcances y potencialidades en lo público.
Lo verdaderamente extraño se da, en el hecho mismo del mensaje que el acompaña, pues el oriundo de Hueyapan de Ocampo es muy dado a enviar mensajes soterrados en sus redes sociales, los cuales, llevan un claro mensaje y destinatario, en esto que aparenta el fragor de la batalla por el poder de cara al proceso sucesorio del 2024.
El escueto mensaje que en un par de párrafos divulgó en sus redes sociales señala: “Inicien su semana con mucha energía.” “Recuerden cada quien se gana su lugar trabajando, no metiendo veneno y engañando al pueblo.” ¡Es tiempo de mujeres! Remata el presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso Local Veracruzano.
Sobre todo, porque se sabría que sería este lunes 18 de septiembre cuando la dirigencia nacional de Morena daría a conocer la “convocatoria” para los aspirantes a las 9 gubernaturas – Chiapas, Guanajuato, Jalisco, Morelos, Puebla, Tabasco, Veracruz, Yucatán y Ciudad de México- en disputa en el próximo proceso electoral federal.
Así el mensaje se presenta horas antes que el Comité Ejecutivo Nacional de Morena apruebe la emisión de la convocatoria donde se definen los requisitos y reglas para la inscripción para que Morena, PT y Partido Verde tengan a sus abanderadas o abanderados.
De buena fuente se sabe que la instrucción principal dictada al Comité Ejecutivo Nacional desde el Palacio Nacional se basaría en bajo el criterio de que en los nueve procesos se logre la unidad y que todos acepten los resultados ya que en varios de ellos se vislumbran competencias muy cerradas entre personajes políticos con fuerte presencia local contra algunos que presumen cercanía con el presidente López Obrador, o con la coordinadora de la 4T, Claudia Sheinbaum.
Bajo ese criterio estaría Veracruz.
En donde se sabe que al momento se ha venido realizando una minuciosa operación política de negociación de carácter casi quirúrgico para garantizar que todos los actores concursantes cierren filas con la hoy secretaría de Energía, Rocío Nahle García, quien a todas luces tendría la preferencia del gran elector.
La intención de dicha operación política se basaría en el hecho mismo de asegurar en no dejar soldados morenistas caídos en la batalla que puedan ser captados por los partidos del Frente Amplio o Movimiento Ciudadano (MC) en franco proceso de desintegración.
A su vez, el mensaje externado por el diputado local veracruzano, se da momentos antes de que el mandatario veracruzano, Cuitláhuac García Jiménez desde su púlpito en Palacio de Gobierno señalará que “suspirantes habrá muchos, pero deben apegarse a lo legal” como advirtiendo que a pesar de sus intentos por contener los caprichos de su secretario de Gobierno, Eric Patrocinio Cisneros Burgos, el personaje se habrá de inscribir en el proceso interno, pero también habrá de tener que aceptar que llegado el momento el resultado no lo favorecerá.
Aun cuando el mandatario estatal pretendió verse muy demócrata al afirmar que se respetan sus derechos constitucionales, la advertencia cayó clara cuando afirmó: “Suspirantes habrá muchos; hablaré con ellos para decirles que, como funcionarios, las reglas son: no utilizar recursos públicos, no dejar de cumplir con sus tareas fundamentales y, en caso de resultar ganador de las encuestas, firmar su renuncia 90 días antes”.
Al menos las dos primeras encomiendas no las cumple su aún secretario de Gobierno, Cisneros Burgos quien por ningún lado es capaz de aguantar una auditoría externa que le evalúe el manejo del recurso público, pues ha quedado más que documentado, el dispendio empleado para su promoción personal como pseudo prócer de la literatura veracruzana y defensor de las comunidades afromexicanas, a las que simplemente ha empleado para posicionarse y darse a conocer.
El mensaje de Cazarín al arranque de la semana vuelve nuevamente a prender las alertas, pues pareciera ser la advertencia anticipada de quien pronostica que las cosas en Veracruz no serán nada tersas, al menos, no tendrán cabida aquellos, que valiéndose de la confianza de quien hoy detenta el poder, solo se beneficiaron y abiertamente traicionaron a quienes los hizo políticos.
Por cierto, que a la par del mensaje divulgado en redes sociales por el diputado local, desde las mazmorras del Palacio de Gobierno, se comenzó hacer circular cierta información denostando el trabajo político del hueyapeño acusándolo de traficar con supuestos despachos contables.
Increíble… como si nadie supiese que quien mueve y controla los hilos del Órgano de Fiscalización Superior (Orfis) ha sido desde su llegada al poder el mismo Eric Patrocinio Cisneros Burgos, quien colocó a la mismísima Delia González Cobos, acusada ya en otros momentos desde el mismo Congreso Local de estar tras una red de corrupción e intento de extorsión a alcaldes y funcionarios estatales.
Al tiempo.
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(COLUMNA “ASTROLABIO POLÍTICO”)
