Miguel Ángel Gómez Ruiz // Contrapunto
La gobernadora electa de Veracruz, Rocío Nahle, tendrá que demostrar que tiene los tamaños para restaurar al estado, todo esto luego de la pésima administración de su compañero de partido, Cuitláhuac García.
Es verdad, de 2018 a la fecha todo ha sido un desastre: pésimas carreteras, inseguridad al por mayor, nula atención a empresarios y él, muy cómodo, gobierna desde la Casa Veracruz y en ocasiones, desde palacio de gobierno.
Se cortó la comunicación con los medios pues su encargado de Comunicación Social, Iván Joseph Luna, con nivel de bachillerato, se dedicó a hostigar a medios y a reporteros. A veces ni siquiera tuvo el nivel para sacar de apuros al gobernador, su jefe.
Muy pocas áreas se destacaron en esta administración: quizá Desarrollo Social, quizás otro poco la Secretaría de Finanzas y la Sedecop, a cargo de Enrique Nachón, pero fuera de allí todo fue de regular a menos.
Inclusive, el mandatario quiso intervenir en áreas en las que carece de conocimiento, como el caso de la Secretaría de Salud e inclusive, en la Fiscalía General del Estado, en donde labora Verónica Hernández, una incondicional del exsecretario de Gobierno Eric Cisneros. En ambas ramas el gobernador exhibió su desconocimiento, pues de por sí era raro que interviniera en asuntos de la Fiscalia General del Estado que se suponía era un órgano independiente.
Intervino absolutamente en el Poder Judicial en donde actualmente su titular, Lisbeth Aurelia Jiménez le rinde tributo. Ella forma parte de un grueso grupo de 22 magistrados (as) colocados por el mandatario y créalo, le obedecen en todo.
Y así, un Veracruz abandonado, con carreteras pésimas, devastado por la extorsión, los feminicidios y el secuestro, sin diálogo con nadie. Hoy todo es peor que hace seis años.
Por eso es que Rocío Nahle, pese a la polémica que vivió, con supuestas propiedades y con las pensiones de su esposo, tiene que demostrar que puede con un paquete muy grande. Ya visitó lugares para refrendar su compromiso para hacer obras prioritarias. Ojalá lo haga y sobre todo, que lo haga sin la finalidad de ganar votos, como han hecho tantos en el país.
Un conocido que ha trabajado de cerca con ella asegura que es una mujer de compromisos y si ella se dedica a cumplir lo que prometió, el estado poco a poco irá recobrando su brillantez.
Pero será muy importante no sólo que cumpla sus compromisos, sino que continúe reuniéndose y trabajando al lado de los sectores con los que alguna vez se reunió. Será valioso que concreten proyectos en beneficio de todos, al final eso será lo que importe.
Concluyendo, para Rocío Nahle lo más importante será que lo primero en su pensamiento, al despertarse, al comer, al acostarse a dormir será Veracruz.
Y si hace un buen trabajo, dejará la mesa puesta para quien podría sucederle en 2030: Ricardo Ahued.
PD Aunque fue un tema del que se habló en todas partes, la Reforma Judicial fue aprobada y promulgada. Los cambios se irán dando poco a poco. Se espera que en junio de 2025 se elija a los nuevos jueces y magistrados y entonces allí veremos si hay resultados y si al final, valió la pena todo esto, luego de tantas marchas, protestas y toma de inmuebles. Es verdad, México requiere una reforma profunda y además, que se endurezcan las penas, pero también será necesario que las Fiscalías realicen un mejor trabajo, sin eso, no se puede aplicar la justicia.
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