Salvador Muñoz//Los Políticos
Paso por el parque de donde vivo y veo a empleados de Alumbrado Público trabajando sobre las bases de las luminarias que al menos el domingo por la noche, no iluminaron esta área verde de Jardines de Xalapa.
Durante la madrugada del domingo, las ratas del cobre se robaron el cable de varias luminarias.
La mitad del parque, la noche del domingo, estaba en tinieblas ambientada todavía por esa neblina que invitaba a la imaginación de unos y al terror de otros, por temor a que en esa oscuridad, saliera algún asaltante.
El temor no es infundado en Jardines de Xalapa. Una vecina hace una semana o poco más, por la mañana, cuando salía a acompañar a su hija a tomar el bus, se percató de un individuo en actitud sospechosa cerca de su edificio. Le gritó a su esposo, quien ya iba a alcanzarla en aras de que mantuviera cerrado el acceso. Eso fue suficiente para que luego, al ir de compras, le saliera al paso esa misma persona acompañada ahora por otra, y lanzara amenazas al grado de mostrarle un arma blanca a la vez que entredientes, le decía: “¡Párate! ¡Párate!” al igual que le ordenaba al otro: “¡No la dejes ir!”
La vecina tuvo que socorrerse con unos empleados de Parques y Jardines que se encontraban en ese momento en labores de limpieza, quienes al ver lo que ocurría, llamaron al 911, mientras los tipos se perdían entre los pasillos de los edificios.
Los días posteriores, fueron una pesadilla para mi vecina que veía en las personas, a sus acosadores. Ayer le pregunté cómo seguía: “Mejor… mejor…” fue su respuesta.
La delincuencia en Jardines de Xalapa va creciendo… del robo de zapatos, tenis, ropa, se pasó a los cristalazos, al robo de llantas, al portazo de carros y ahora, al asalto con cuchillo en mano…
Este lunes, recién la mañana, una joven fue asaltada con arma blanca cerca del módulo Nogal.
El módulo Nogal es el último conjunto de edificios para llegar a la avenida Lázaro Cárdenas… el módulo Nogal es el conjunto de edificios que al menos, en los últimos sucesos, ha sido el lugar ideal para que se perpetren los atracos a transeúntes, de preferencia mujeres.
Hay alarma de seguridad entre los vecinos… hay rondines de patrullas en Jardines de Xalapa… hay vecinos que, incluso, han instalado cámaras de vigilancia en aras de persuadir a los delincuentes… hay vecinas que se han armado de “Tasers” (herramienta de carácter disuasivo de descargas eléctricas) que cuando se sienten amenazadas o ven a personas sospechosas, lo activan para mantener la distancia… y aún así, la delincuencia no para…
Los vecinos hablan de silbatos de emergencia… de pedir mayor vigilancia y rondines… integrar cámaras de vigilancia en la unidad… y hay también clamores de desesperación: “Agarrar a los delincuentes, amarrarlos y golpearlos”…
Hace años me tocó vivir un episodio así, al pie de mi edificio, cuando unos vecinos sometieron a un par de delincuentes que intentaba abrir un carro… fueron golpeados… muy golpeados.
El problema de la delincuencia en Jardines de Xalapa es complejo… hasta el momento, sólo han sido pérdidas materiales, sustos, corajes, y con todo que patrullas municipales y de SSP hacen rondines… si bien, uno como vecino no desea una tragedia mayor en Jardines de Xalapa, igual rechaza la idea de que llegue el momento en que Fuente Ovejuna tenga que hacer justicia por sí ante la desesperación, angustia, zozobra que la delincuencia ha generado en el vecindario…
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