- A los arranques de campaña ya se anuncia la llegada de los dirigentes nacionales de MORENA, Luisa María Alcalde Luján; y del MC, Jorge Álvarez Máynez
politicaaldia.com .-Esta mañana, en los cafés políticos de la capital veracruzana, se conversó intensamente de lo que ya está en puerta: las elecciones por las presidencias municipales.
De la otra elección, la del Poder Judicial, poco se habla, a no ser en los círculos de abogados que conforme a sus intereses alaban a sus conocidos, pero hasta ahí. Esa elección es para los enterados, no es para el pueblo, aunque se diga lo contrario. La mayoría de los candidatos al poder judicial no son conocidos, pues ni siquiera a los que se la han pasado años y años tras la solución de los casos, les ha interesado que la sociedad les conozca la cara.
Y bueno, quiénes somos para contradecir a los priistas de corazón que de verdad aman a su partido y han visto a las sombras a que lo han llevado esos personajes, por eso de calle se llevan los canillazos del día.
Pero de la elección municipal hay tema hasta para echar pa’rriba. Hay mucho interés y está visto que lo que viene será diferente, a ras de piso, las marcas de los partidos importan menos, y las personas, sus hechos y antecedentes son los que cuentan más.
No se sabe en qué terminará, pero eso sí, se prevé que será una elección muy cerrada en varios municipios.
Pero el tema caliente de esta mañana versó en torno a los arranques de campaña en los que ya se anuncia la llegada de los dirigentes nacionales de MORENA, Luisa María Alcalde Luján; y de Movimiento Ciudadano, Jorge Álvarez Máynez. Del PAN no se sabe aún si acudirá. Pero lo que sí se escucha es que los priistas no quieren ver ni en pintura a Alito Moreno, es más, sugieren que le den vacaciones pagadas por unos dos meses al Fofo Ramírez Arana y a la diputada federal Lorena Piñón, pues el repudio popular a sus personas le harán más daño que bien a la campaña de Silvio Lagos y los otros 211 candidatos. Silvio, comentan, es un personaje sano y muy diferente que podría salvar al partido de una catástrofe electoral.
Como diría el dicho, “no me ayudes compadre”, es el grito.
Y bueno, quiénes somos para contradecir a los priistas de corazón que de verdad aman a su partido y han visto a las sombras a que lo han llevado esos personajes, por eso de calle se llevan los canillazos del día.
