¿Y las langostas?
Manolo Victorio
El canciller mexicano Marcelo Ebrard Casaubón urgió al Consejo de Seguridad de la Organización de la Naciones Unidas que haga algo, -quizá militarizar la inoculación desde Tapachula a Tijuana con los cascos azules- para que la vacuna contra la Covid-19 llegue a los países pobres.
En una intervención histórica, el funcionario todoterreno de Andrés Manuel López Obrador, el puntero en las encuestas para sucederlo, dijo que no es posible que sólo diez países acaparen las tres cuartas partes de las vacunas que se producen en el mundo.
Imbuido por el espíritu de Benito Juárez, salió en defensa de nuestra herida latinoamerica, donde hay países, dijo, que no han recibido una sola vacuna.
Y en esta realidad incomprensible para el mexicano común, no entendemos el porqué si La subsecretaria de Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la cancillería mexicana, Martha Delgado, a través de Twitter, dio a conocer que “tan sólo de las vacunas candidatas de AstraZeneca y Pfizer, México ha pre-comprado 163.3M (millones) de dosis para 63 por ciento de mexicanos, lo que nos colocaría en octavo lugar de la tabla (de países que han pre-comprado el biológico). Esto sin contar las 35M de dosis de CanSino, así se cubriría al 92 por ciento de la población ubicándonos en quinto lugar”, las vacunas no han llegado.
Y es que, hasta el corte de anoche, sólo se han aplicado un millón 58 mil 139 vacunas en territorio mexicano.
Autoridades de la Secretaría de Salud informaron este día que el número de muertos por coronavirus en México llegó a 177 mil 61, con el registro de mil 75 defunciones más.
A la crisis de las vacunas se suman los apagones -éramos muchos y parió la abuela, diríase en el lenguaje vulgar pero comprensible-, que nos remiten a las sagradas escrituras como parte de un catalogo de calamidades que debemos padecer por nuestro pecaminoso proceder.
Las diez plagas que según el Antiguo Testamento Dios envió a los egipcios para que el faraón dejara partir a los hebreos pueden ser mucho más que una terrible historia bíblica; esta serie de calamidades que comenzó con el Nilo teñido de sangre, catástrofe a la que siguieron hordas de ranas, mosquitos y langostas, pestilencia, enfermedad y granizo de fuego, entre otros terribles males.
Nuestro castigo ha sido la peor tormenta invernal en la historia de Texas, Estados Unidos, que nos ha dejado, en coletazo que la 4T atribuye a neoliberales y conservadores que vendieron nuestra soberanía nacional, que nos dejó en la indefensión total, a merced de los apagones que han dejado perdidas por 200 millones de dólares en el norte del país.
A esto se suma al hecho que Texas intervino en su industria de gas natural en medio de una crisis energética sin precedentes al prohibir a los productores enviar energía y combustible para calefacción a través de las fronteras estatales.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, dijo este miércoles durante una conferencia de prensa que emitió una orden que prohíbe las ventas a productores de energía fuera de sus fronteras hasta el 21 de febrero.
Ni modo, a buscar los quinqués.
Malditos neoliberales, que muera el imperio.
… De otro costal.
No; el problema no es Jair Alejandro García González, dimitido vocero de la Fiscalía General del Estado de Veracruz
Jair encaneció más tratando de enderezar entuertos, como muertero en funeraria, arregló, maquilló y trató de presentar una realidad menos cruda, letal, en la procuración de justicia.
Tampoco se le ocurrió, en horas de ocio, susurrarle a la fiscal que, vistiendo de negro, enfundada en uniforme táctico, con una pistola escuadra Glock inatascable, infalible aún bajo el agua, en el carcaj, infundiría miedo a los malosos y se construiría una imagen de sheriff de la 4T, incorruptible e invencible; una especie de Tomb Raider, pero del lado de la justicia.
No. Hay mil 316 cuerpos sin identificar en 95 fosas clandestinas en el estado de Veracruz.
Hay 182 carpetas de investigación por 84 feminicidios, 97 por homicidios dolosos y una más por secuestro.
Veracruz registró un 28 por ciento de muertes violentas de mujeres en este 2020.
21 actores políticos han sido asesinados desde el 1 de diciembre del 2018, solo en tres casos la Fiscalía General del Estado (FGE) ha informado sobre personas detenidas.
Los aprehendidos son: un exsíndico y una exalcaldesa, un presunto líder de la delincuencia organizada, y dos civiles. Lo anterior equivale a menos del 15 por ciento de efectividad, en relación a los casos donde hubo capturas. Ninguna persona ha sido sentenciada.
Veracruz ocupa el tercer lugar en crímenes por violencia política.
Amén de que la FGE es, junto con la SSP, la que más viola los derechos humanos de los veracruzanos.
Un largo rosario de asuntos inconclusos que no se resuelven con imagen pública ni comunicados de prensa lanzados con pulcritud ortográfica.
Cambiar al mensajero no resuelve el problema, sólo se patea el bote.
Bienvenido Mario Lozano Carbonell.
Correo: mvictorio33@hotmail.com
Twitter: @ManoloVictorio