Por: Alejandro Carrillo.
Cdmx.-El día de hoy la secretaria de relaciones exteriores dió a conocer el nombramiento de la ex gobernadora priísta de Sonora como titular del cónsulado de México en Barcelona.
Así mismo, se dió a conocer el nombramiento del ex gobernador priísta de Campeche Carlos Miguel Aysa como embajador de México en república dominicana.
Ambos nombramientos fueron realizados por el gobierno federal encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, Y son para muchos el pago ante la entrega de los estados priistas con una “suave terzura”, con resultados que fueron eminentemente favorables para Morena.
Ambos priistas, no habrían renunciado a su militancia, o al menos no lo habrían hecho público, tampoco habrían celebrado sus nombramientos motivo por el cuál se presume que se dan en la sombra de “un amasiato” con el gobierno de la 4T.
Ante el hecho el presidente del PRI Alejandro Moreno dió a conocer en sus redes sociales un mensaje que pondría en jaque a ambos priistas.
En su mensaje Alito Moreno detalló:
Los exgobernadores @ClaudiaPavlovic y @AysaGonzalez fueron autoridades emanadas del PRI, por lo que su militancia está sujeta a los estatutos del Partido. De aceptar la propuesta del Gobierno de Morena estarían incumpliéndolos, provocando sanciones internas incluida la expulsión.
En el mismo hilo refirió:
Las oportunidades que da el PRI deben corresponderse con buen trabajo y resultados, pero también con lealtad a México y a los mexicanos.
Que no quede duda, estaremos atentos a la decisión que tomen y actuaremos en consecuencia.
Enmedio de la tormenta la senadora Lily Téllez también se refirió al hecho señalando en un post en su cuenta de Twitter dónde señaló:
Se desconoce el destino en las carreras políticas de ambos funcionarios hoy del servicio exterior, sin embargo lo preocupante para la alianza PRI-PAN-PRD es que la pueda tambalear rumbo a los comicios de Oaxaca, Hidalgo, Aguascalientes, Durango y Tamaulipas este año y de EdoMéx el 2023.
Lo que si es un hecho es que el evento se traduce en una teoría de que el presidente pueda pactar la salida “Digna” al servicio exterior de los gobernadores de oposición a cambio de una posible entrega pactada.