Unas 10 mil personas asistieron al Auditorio Nacional para entonar canciones como “Él me mintió”, “Pídeme” y “Castillos”, esta junto al pequeño Chucho
eluniversal.com.mx
Con una proyección y grabación de la voz de Diego, Ana Victoria interpretó a dueto “Pídeme”
Los sonidos de batería poco a poco fueron aumentando en intensidad hasta que el bombo finalmente, con un ritmo repetitivo, encendió los gritos del público y se anunció la llegada de Ana Victoria y Amanda Miguel al Auditorio Nacional. Con trompetas que emulaban la entrada de la realeza, apareció, luciendo un vestido plateado, Amanda Miguel y en la siguiente estrofa, Ana Victoria en un vestido negro y una diadema, que hizo juego con el vestido de su colega.
Las cantantes involucraron al público desde la primera canción con su enérgica interpretación, y animandolos a mover los brazos de un lado a otro.
Para el segundo tema, al ritmo de las palmas, Amanda se quedó bailando en medio del escenario con una gran sonrisa dibujada en el rostro. Ana Victoria le cedió el protagonismo situándose a la altura de las coristas y dejó que Amanda desfilara por todo el escenario junto a la gran capa negra que portó.
“Qué hermoso, qué hermosa noche, es bellísimo tenerlos aquí, super emocionada de estar aquí, celebrando la vida de mi esposo, espero que disfruten mucho, es un show que hemos preparado con mucho amor para él, es un momento muy especial en mi vida, porque pasaron muchas cosas en mi vida”, dijo Amanda con la voz entrecortada.
Invita al pequeño Chucho
Más adelante en la velada, dio la bienvenida a Chucho, un niño que ama sus canciones, y que hizo sentir orgullosa a Amanda Miguel, y le hizo ver que su música ha trascendido generaciones.
Con una proyección y grabación de la voz de Diego, Ana Victoria interpretó a dueto “Pídeme”
Los sonidos de batería poco a poco fueron aumentando en intensidad hasta que el bombo finalmente, con un ritmo repetitivo, encendió los gritos del público y se anunció la llegada de Ana Victoria y Amanda Miguel al Auditorio Nacional.
Con trompetas que emulaban la entrada de la realeza, apareció, luciendo un vestido plateado, Amanda Miguel y en la siguiente estrofa, Ana Victoria en un vestido negro y una diadema, que hizo juego con el vestido de su colega.
Las cantantes involucraron al público desde la primera canción con su enérgica interpretación, y animandolos a mover los brazos de un lado a otro.
Para el segundo tema, al ritmo de las palmas, Amanda se quedó bailando en medio del escenario con una gran sonrisa dibujada en el rostro. Ana Victoria le cedió el protagonismo situándose a la altura de las coristas y dejó que Amanda desfilara por todo el escenario junto a la gran capa negra que portó.
“Qué hermoso, qué hermosa noche, es bellísimo tenerlos aquí, super emocionada de estar aquí, celebrando la vida de mi esposo, espero que disfruten mucho, es un show que hemos preparado con mucho amor para él, es un momento muy especial en mi vida, porque pasaron muchas cosas en mi vida”, dijo Amanda con la voz entrecortada.
Invita al pequeño Chucho
Más adelante en la velada, dio la bienvenida a Chucho, un niño que ama sus canciones, y que hizo sentir orgullosa a Amanda Miguel, y le hizo ver que su música ha trascendido generaciones.
“Castillos” fue la canción que Amanda dedicó a Chucho, quien la acompañó en los coros, y emocionó a todo sus seguidores.
El repertorio continuó con “Dudas”, “Las pequeñas cosas”, y la intensidad de “Siempre te amaré” y “Quién de los dos será”, donde Ana Victoria regresó al escenario.
Al interpretar “Pasadiscos” Amanda dedicó el final a su fallecido esposo Diego Verdaguer, “Al parecer no han olvidado sus canciones”, cantó, finalizando con una larga nota, mirando y levantando las manos, en gesto de agradecimiento hacia el cielo.
Luego, Amanda fue al piano, y recordó otra vez emocionada al borde de las lágrimas: “Esta canción me la escribió mi esposo, me la dedicaba, y bueno ahora yo se la dedico a él”, dijo para interpretar “Es así mi amor”.
El homenaje para Diego continuó quizá con el momento más nostálgico de la noche cuando en las pantallas del recinto de Reforma se proyectó una breve semblanza, con videos, discursos y fotografías de Diego.
“Tengo tanto agradecimiento a mi esposo, porque es el creador de mi música de mi imagen, me ha dejado una gran responsabilidad, el era mi mayor fan, amaba mi música y por eso es muy importante para mí continuar mi carrera, porque así es como el siempre me quiso ver, fuerte, bravo Diego, nos dejaste demasiado”, expresó Amanda Miguel.
Como si Diego estuviera ahí
Al finalizar el video, sonó “La Ladrona” con la voz de Diego Verdaguer en el sonido del Auditorio Nacional, todo el público coreó “Mi corazón es delicado, tiene que estar muy bien cuidado”, con intensidad y cariño, como si estuviese Diego cantando en persona.
Diego revivió durante una canción, cuando Ana Victoria interpretó a dueto con una proyección y grabación de la voz de su padre, la canción “Pídeme” después de la cuál agradeció a su público “Se la dedico con toda mi alma a mi padre”.
En la canción, “Simplemente amor”, nuevamente la voz de Diego apareció en el sonido del recinto, para ahora acompañada de la voz de Amanda, como presagiando el final del concierto, y describiendo y recordando lo que significaron tantas décadas como pareja.
Pero antes, Amanda interpretó “Fuiste tú” de Ricardo Arjona, una canción que grabó con Diego Verdaguer en vida, como parte de un proyecto que nunca llegó a concretarse, la proyección de la figura del cantante volvió a aparecer en el escenario.
Para finalizar, Amanda interpretó “Él me mintió” y advirtió su pronto regreso con la canción “Volveré”, agradeció la llegada de su nieto, como una bendición tras la partida de Diego y finalmente se despidió de su público.