• Se trata de una enfermedad que afecta principalmente a la población infantil de México y representa 15% de todos los cánceres.
El sarcoma es un tipo de cáncer que se desarrolla en los tejidos blandos del cuerpo, como los músculos, los huesos, los tendones, los cartílagos, los vasos sanguíneos y los tejidos adiposos, también puede afectar los órganos internos, así lo explicó Víctor Hugo Cabrera García, oncólogo pediatra del Hospital General Regional (HGR) No. 1 de Orizaba, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Veracruz Sur.
Informó que los sarcomas se originan en las células del tejido conectivo, este tejido es responsable de mantener la estructura y la forma del cuerpo. Estas células pueden volverse cancerosas y comenzar a crecer y multiplicarse de manera descontrolada, formando tumores malignos, así declaró el oncólogo pediatra.
Cabrera García recordó a la población que existen varios subtipos de sarcoma, entre los que se incluyen el sarcoma de tejidos blandos y el sarcoma óseo. El sarcoma de tejidos blandos se desarrolla en los tejidos que conectan, sostienen y rodean otros órganos y estructuras del cuerpo, como los músculos, los nervios, los vasos sanguíneos y los tejidos fibrosos.
Por otro lado, el sarcoma óseo se origina en los huesos del cuerpo. Estos subtipos tienen características distintivas y pueden requerir enfoques de tratamiento diferentes.
Para ayudar a un control y diagnostico oportuno el oncólogo pediatra compartió información sobre algunos síntomas comunes los cuales pueden incluir una masa o bulto que puede ser doloroso o sensible al tacto, dolor persistente en el área afectada, limitación del movimiento y fatiga.
Mencionó que es importante tener en cuenta que estos síntomas también pueden estar presentes en otras condiciones no relacionadas con el sarcoma. Sin embargo, si se experimentan estos síntomas de manera persistente y se detecta una masa o bulto en el tejido blando, es fundamental buscar atención médica para obtener un diagnóstico adecuado.
“El diagnóstico del sarcoma generalmente implica realizar pruebas por imágenes, como radiografías, resonancias magnéticas, tomografías computarizadas, ecografías y gammagrafías óseas, para obtener imágenes detalladas del área afectada”, afirmó.
Además, el médico especialista declaró que, se puede realizar una biopsia, que consiste en tomar una muestra del tejido sospechoso para su análisis en el laboratorio. Estas pruebas ayudan a confirmar el diagnóstico de sarcoma y proporcionan información sobre el tipo y la etapa del cáncer.
Por último, destacó que el sarcoma es un tipo de cáncer relativamente poco común en comparación con otros tipos más frecuentes, como el cáncer de mama o el cáncer de pulmón. Sin embargo, es crucial buscar atención médica si se experimentan síntomas sospechosos para obtener un diagnóstico y un tratamiento adecuados.
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