Por: Itzel Sandoval
La danza Moros y Cristianos realizada en el marco de las fiestas en honor a San Mateo, se ha convertido en un referente de visita de estatales y extranjeros.
Colores, diversión, alegría, magia y tradición envuelven a esta danza que forma parte de la cultura de este espacio de Veracruz.
Niños, jóvenes y adultos participan en esta danza que se caracteriza por desarrollarse en el atrio de la parroquia, así como en la calle en donde se ubica la casa en la que se realizó la velación del santo, actividad que también forma parte de estos festejos.
La danza ha pasado por varias generaciones, pues tiene por objetivo fomentar y darle continuidad a esta tradición que ya es indispensable.
Cada participante, sin importar su edad, selecciona el disfraz con el que quiere participar en la danza.
Los detalles son importantes, por lo que se escoge la máscara, la peluca, el vestuario y el calzado que se quiere portar durante esta “lucha campal”.
Es por ello que se pueden ver gladiadores, payasos, piratas, muñecas, hombres lobo, catrines, monjas, entre otros disfraces que esconden a un menor, un joven o un varón que comparte con sus hijos esta tradición.
La mayoría decide ser “malo”, por lo que selecciona un disfraz variado cada año y son muy pocos los buenos que siempre escogen vestirse de Santiagos.
Esta danza es una expresión artística que representa la lucha y victoria de Santiago Apóstol sobre Pilatos en el atrio de La Parroquia, por lo que se acompaña de música interpretada con flautas y tambores.
La feria en Naolinco inicia el 19 de septiembre. Una vez concluido el ensayo real se realiza la entrega de los accesorios y ropa que cada participante lucirá durante las dos semanas de bailadas.
Para el día 20 se realiza la procesión de San Mateo por las calles de Naolinco, misma que es acompañada por la danza.
El día 21 se realiza la primera y más importante danza en el atrio de la iglesia. Cada una de las presentaciones se realizan todos los días a partir de las 16:00 horas hasta las 20:00 horas aproximadamente y concluyen el domingo 02 de octubre con el entierro del huesito.
El entierro del huesito es la conclusión de la actividad, la cual representa la derrota de Pilatos. Para esta actividad que marca el final de los festejos se pasea por las calles de Naolinco un féretro que simula un funeral acompañado de lamentos, antorchas y verbena por parte de los locatarios y turistas.