El trágico choque por corte de circulación presuntamente provocado por un trailero que no respetó el alto al incorporarse a la caseta de cobro, procedente de la carretera federal 185 Transístmica Sayula – Acayucan, cobró la vida de dos jóvenes.
Según testigos, desgraciadamente los motociclistas – uno de ellos acompañado de su pareja que permanece grave – viajaban a exceso de velocidad, jugando “carreritas” junto a otros dos bikers, y ni tiempo tuvieron para intentar frenar.
Más allá de las circunstancias, este hecho nos recuerda lo frágiles que somos en nuestro caminar diario.
Conducir no es solo moverse, es asumir una responsabilidad por la vida propia y la de los demás.
Empatía, respeto y conciencia pueden marcar la diferencia entre llegar o no llegar.
Ojalá esta tragedia pueda concientizar a los jóvenes que a diario arriesgan sus vidas y la de los demás al manejar como locos.
Descanse en paz Sanders Hernández Caballero y Carlos Daniel Zapata Juárez.
Fortaleza para sus familias y seres queridos. 