Revelaciones
Descalifican e insultan
Margarito Escudero Luis
Más que criticas, lo que el presidente de la República Mexicana ha recibido luego de dar su informe trimestral, son ataques e insultos. Bajeza de un sector que aún no se acomoda en la Cuarta Transformación y que espera que las cosas sean como antes, siempre a su favor sin importar quienes resulten afectados.
Mucho se especuló sobre el contenido del discurso, se esperaba un anuncio que llevará beneficios a un sector empresarial, el de la ultraderecha, con grandes intereses políticos.
Pero no se les hizo, por lo menos no en la forma como ellos lo quieren, esperando que el país se endeude para ellos sacar la mayor ventaja.
Sin embargo, el proyecto del presidente Lopez Obrador cambia el orden de las cosas a las que están acostumbrados los poderosos empresarios; “primero los pobres, por el bien de todos”, o sea ya no primero ellos.
En este país el 80 por ciento de sus habitantes vive en algún nivel de pobreza; es decir, que batalla para pagar sus cuentas, para surtir la despensa, etc. Entonces este gobierno busca que el nivel de bienestar de ese 80 por ciento cambie, que tenga capacidad de pago sin andar apretándose el cinturón cada vez que haya inscripciones en las escuelas, o que haya que surtir la despensa, o que se enferme un miembro de la familia.
O sea, primero los pobres y luego los señores empresarios que creen que el país funciona gracias a ellos.
Esa postura del mandatario tiene a muchos echando espuma por la boca, no están acostumbrados a que se les ignore ni a recibir órdenes.
Otro grupo de empresarios, más conscientes de la situación se han sumado al programa del presidente. Actúan con más inteligencia, sumando no dividiendo, saben que si la clase media se fortalece económicamente, tendrán poder de compra, por lo tanto podrán acudir a los centros comerciales, pagar cuentas y vivir con tranquilidad.
Los que apuestan por el desastre en Mexico, por golpe de Estado o alguna acción violenta para desestabilizar al gobierno, son los que emprendieron una andanada de descalificaciones, insultos, bajezas y una serie de análisis que condenan al fracaso las intenciones presidenciales.
A pesar de eso, López Obrador sigue adelante, en algún momento de esta historia dará a conocer la parte que corresponde a ese sector recalcitrante.
El mandatario confía en el apoyo del pueblo, único apoyo real, porque puede notarse como muchos de sus cercanos hacen como que le hacen caso, pero su corazoncito late por otro lado, a pesar de las muestras de apoyo que él mismo Andrés Manuel les brinda en público.
Pero esa es otra historia digna de ser contada próximamente.