El fallido ex candidato a gobernador José Francisco Yunes Zorrila ayer anduvo en Altotonga con los últimos sobrevivientes del PRI. Aunque había anunciado que dejaría la actividad pública y que se desligaría de la política, al parecer la veda ha concluido. El joven político se reunió con líderes priistas de ese municipio: El anfitrión fue Martín Pérez Santiago a quien reconocen como el Tapón de Alberca y también hizo uso de la voz Marco Vinicio Domínguez… Los estertores de la muerte del tricolor resuenan en el nebuloso clima del distrito peroteño…
Si el sicólogo tiene razón, entonces, el ex priista y neopanista, por ahora, Miguel Ángel Yunes Linares trama ya, ya, ya, su renuncia al PAN.
La señal, como el topo de Carlos Marx asomando a la superficie para calibrar el medio ambiente, fue dada la semana anterior.
Se lanzó con todo en contra de Marko Cortés, el Presidente del CEN del PAN amigo de Ricardo Anaya.
Dijo, por ejemplo, que no puede con la carga política y navegan sin rumbo, sin brújula, sin objetivo, sin estrategia.
Y si se mira hacia el pasado, cuando, y por ejemplo, también se fue del PRI, tiempo cuando perdió 107 presidencias municipales y, de ñapa, la primera candidatura a gobernador, también expresó el mismo discurso.
Además, en aquel entonces, dijo que en la familia tricolor había muchos, demasiados traidores.
El Yunes azul está o estaría lastimado.
Los Tribunales Electorales, tanto Federal como Estatal, anularon la elección del Presidente del CDE del PAN, donde se encumbrara su protegido Pepe Mancha.
Y el CEN de Marko Cortés permaneció callado, “dejando hacer y pasar”.
Tal cual se está reproduciendo a sí mismo.
De entrada, llamar la atención.
Después, presionar.
Luego, buscar un pretexto para desertar del PAN.
Incluso, diría el sicólogo, presiona que lo expulsen.
Más todavía, hacerse la víctima. Y el mártir.
Más cuando los vientos huracanados le están soplando.
Por ejemplo, ya se le fueron los diputados locales Omar Miranda, Bingen Rementería, Rodrigo García Escalante y está listo el Senador Julen Rementería del Puerto para seguir a su hijo.
Bien decía Morris West en su novela “El arlequín”, los grandes imperios y emporios se destruyen desde adentro.
El chamán dice que en caso de consumarse la profecía, entonces, el ex priista, ex panista, cerradas las puertas en MORENA, Miguel Ángel Yunes se volvería perredista, donde Rogelio Franco Castán lo recibiría con pompa y festín.
EL PRD, SU NUEVA ÍNSULA
Yunes Linares primero se dejó ver hace unos días con Rogelio Franco Castán en el Café de la Parroquia en Boca del Río, donde medios de comunicación solo consignaron el hecho, porque no dió ninguna entrevista.
Luego Miguel Ángel Yunes fue con Rogelio Franco Castán al velorio en la Catedral de Xalapa del Cardenal Emérito, Sergio Obeso Rivera.
Después, lanzó su comelitona en casa del primogénito en Boca del Río.
Y en el atracón hubo perredistas enviados por Rogelio Franco para hacer bulto y presencia.
También, se afirma, que como utilería fueron usados parte de sus trabajadores.
Hubo Panistas que apenitas comienzan, sin una biografía política, sin liderazgo propio, sin representatividad dentro del Partido.
Y si en el mes de diciembre del año 2016 cuando ocupara la silla embrujada del palacio de Xalapa, los perredistas fueron beneficiados con cargos públicos, entonces, y de consumarse la profecía del chamán, significaría que hacia el año 2021, desde el PAN (en caso de seguir) o desde el PRD (su partido en ciernes) lanzaría a los perredistas como candidatos a presidentes municipales, síndicos, regidores, diputados locales y federales.
La Maestra Elba Esther Gordillo y Roberto Madrazo Pintado confirmarían su tesis.
Yunes Linares, dirían, es así.
Mucha experiencia.
Mucho fogueo.
Muchas mañas.
Pero impulsivo y frenético.
El hígado, por encima de las neuronas.
Uno de sus cercanos lo describe de la siguiente forma:
“De diez estrategias que le planteo… solo acepta una, y a regañadientes. Primero es él. Luego, él. Y al último, él”.
ES MIGUEL ÁNGEL YUNES O GUZMÁN AVILÉS
El 8 de Septiembre será la elección del Presidente del CDE del PAN.
En la contienda interna, Joaquín Guzmán Avilés y Pepe Mancha.
Pero más, mucho más allá de Pepe Mancha, en realidad, la feroz y reñida competencia es, será, entre Guzmán Avilés y Yunes Linares.
Son los Yunes o los Guzmán Avilés.
Incluso, y así como el Miguel Ángel Yunes despotrica contra Marko Cortés, es Miguel Ángel Yunes o es el PAN, el partido político que le abriera las puertas y originara la renuncia de Gerardo Buganza Salmerón, Alejandro Vázquez Cuevas, Juan Bueno Torio y sus fans, seguidos por la inconformidad de cientos, miles quizá, de Panistas, desde las cúpulas hasta la militancia.
Luego de su renuncia al PRI, más de 25 años de militancia, siempre encumbrado, el PAN lo cobijó.
Y desde el PAN alcanzó estadios superiores.
Por ejemplo, con Vicente Fox y Felipe Calderón.
Luego, en un par de ocasiones fue candidato panista a la gubernatura.
Y para sus hijos, cargos públicos: Presidencias municipales, diputaciones locales y la senaduría.
Ahora, cuando ya utilizó al Partido Acción Nacional en repetidas ocasiones, así como entró al PAN, también pareciera estarse yendo.
Las semanas próximas serán indicativas.
El PAN enfrentará un reajuste de fuerzas políticas.
Los Panistas de convicción están ante la prueba de fuego.
Es Miguel Ángel Yunes o es el PAN.
Es Miguel Ángel Yunes o Guzmán Avilés.
Pepe Mancha solo es un títere y quien, claro, ha sacado jugo del viaje “ordeñando la vaca” como lo documentara en su denuncia el Titular del ORFIS, Antonio Lorenzo Portilla Vázquez.